La Renta Activa de Inserción (RAI) es una prestación específica diferenciada de la prestación contributiva (protección por desempleo) y de la prestación asistencial (subsidio). Está dirigida a los desempleados con especiales necesidades económicas y dificultad para encontrar empleo que adquieran el compromiso de realizar actuaciones de inserción laboral.
Los requisitos exigidos son:
- Ser mayor de 45 años.
- Ser demandantes de empleo inscritos durante 12 meses o más.
- No tener derecho a otra prestación o subsidio.
- Carecer de rentas de cualquier naturaleza, superiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional.
Además podrán beneficiarse de esta prestación, otros colectivos como menores de 45 años con una discapacidad mínima acreditada del 33%; Trabajadores emigrantes retornados que hubieran trabajado al menos seis meses en el extranjero desde su última salida de España, y personas que tengan acreditada la condición de víctima de violencia de género, sin requisitos de edad o tiempo de inscripción como desempleado.
La prestación consiste en una prestación económica que se podrá devengar durante once meses, equivalente al 80 % del IPREM (527,24 para 2009), una ayuda para incentivar el trabajo y la integración en un itinerario de inserción laboral realizado por un asesor de empleo.
Si reúne los requisitos debe presentar su solicitud de admisión en la oficina de empleo que corresponda de acuerdo al domicilio del trabajador.
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